Salud. Son los enfermos renales. El trasplante les abre una luz de esperanza
La Razón
A sus 65 años, el ex diputado nacional Gonzalo
Simbrón pide fervorosamente un deseo para 2011. “Quiero que me donen un
riñón”, ruega desde el Hospital Obrero a donde acude tres veces por
semana para el tratamiento de hemodiálisis.
El ex político del MNR, sufre de insuficiencia renal. Hace
cinco años que su riñón ha dejado de funcionar y debe acudir a este
procedimiento para que una máquina reemplace las funciones del órgano
que perdió. “El dializado es un hombre enterrado a medias, porque de los
siete días de la semana, debe internarse tres”, añade el ex hombre
fuerte de los movimientistas.
Según datos del Ministerio de Salud y Deportes, en Bolivia existen unos 2.000 pacientes renales que necesitan un riñón y cerca de 300 personas mueren cada año por insuficiencia renal, mientras esperan el anhelado trasplante de riñón.
El Hospital Obrero reanudó el 2010 los trasplantes de riñón con donantes vivos y en diciembre pasado realizó dos injertos cadavéricos a dos enfermos renales crónicos, de escasos recursos, que ahora podrán vivir al menos unos 10 años más, sin necesidad de la hemodiálisis.
“El que tiene insuficiencia renal crónica tiene una calidad de vida muy mala, no puede ingerir nada porque los alimentos se tienen que eliminar a través del riñón y si éste está mal, todo se complica. Para reemplazar esa importante función se debe acudir a la hemodiálisis peritonal”, resume el director del Obrero, el médico Freddy Sandy.
Unas 200 personas en La Paz acuden a este tratamiento de manera diaria y 20 máquinas trabajan en cuatro turnos. La Caja Nacional de Salud brinda el servicio como parte del Seguro para los trabajadores.
Por eso las opciones del trasplante con donante vivo y ahora cadavérico, como medida terapéutica, permitirían a Gonzalo Simbrón y a otros 199 pacientes restablecer la función del riñón. “No sólo hay que curar, sino curar con calidad de vida”, asevera Sandy desde la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del Hospital Obrero, en Miraflores.
Simbrón se ilusiona al oír sobre los dos últimos casos de trasplante con un donante cadavérico. Él es uno de los candidatos al trasplante. “Espero un donante estoy buscando uno. Hay gente a la que un día les hice un favor y ahora se me acercaron dos para (donarle su riñón), pero lamentablemente no son compatibles conmigo”, afirma con dolor.
VULNERABLES. A unos cinco metros de Simbrón se encuentra el concejal del MSM, Freddy Miranda, postrado y conectado a otra máquina que suple las funciones del riñón. “Los paceños debemos hacernos siempre el examen de la creatinina porque muchos tenemos presión alta y es una de las causas para la insuficiencia renal además de la diabetes”, recomienda.
Simbrón, que en la década pasada llegó a presidir cuatro comisiones en la Cámara de Diputados, durante dos gestiones, se arrepiente el haber hecho poco por la salud. “Nos hemos equivocado, cuando estamos en plena función de Gobierno, los políticos nos olvidamos de la salud”.
Aún conserva su gran contextura física, pero habla muy poco y reconoce que el tratamiento además de ser “un poco incómodo va matando poco a poco tu organismo”.
El ex político ahora es el presidente de la Asociación Boliviana de Dialisados y Trasplantados cargo al que no dudó en aceptar cuando le invitaron los cerca de 2.000 afectados.
“El transplante es una bendición, aquí el 70 por ciento de nosotros sueña con uno”, señala el ex político. Levanta la cabeza, habla con las manos, se oye su voz de mando, quizás como esos días cuando se dirigía a sus militantes en una concentración política y pide otro deseo. “Ojalá que nuestras autoridades puedan aprobar el Reglamento del Donante que salvaría muchas vidas en Bolivia”.
Algunos datos de la patología
LA INSUFICIENCIA RENAL
Es cuando los riñones dejan de funcionar correctamente. Fisiológicamente se describe como una disminución en la filtración de la sangre tasa de filtración glomerular (TFG). Clínicamente, esto se manifiesta en una creatinina del suero elevada.
SILENCIOSA
Esta enfermedad es silenciosa y los síntomas no se manifiestan, uno puede llevar el mal desde hace 10 años, por eso es vital el control médico, al menos una vez por año, para detectarlo y tratarlo.
Existen dos clases de donantes
Para quienes sufren de insuficiencia renal, además de la hemodiálisis, existe la posibilidad del transplante de riñón con donantes vivos y ahora también cadavéricos.
“Para el primero, la ley señala que deben ser familiares hasta el cuarto nivel de parentesco y ahora pueden acceder aquellos que tengan un vínculo laboral”, dice el cirujano general del Hospital Obrero, Luis Áñez.
En el segundo caso, la familia de forma voluntaria puede donar el riñón de su familiar de manera altruista para que alguno de los enfermos crónicos renales, previo estudio médico, pueda recibir el riñón de la persona que necesariamente debe haber fallecido de muerte cerebral, explica el médico.
En el Obrero funciona el Programa del Donante Vivo donde uno puede presentarse para donar su riñón. Quienes donan no tienen ninguna dificultad física luego.
Periodista:Jorge Quispe - La Paz
http://www.la-razon.com/version.php?ArticleId=123669&EditionId=2402.
Según datos del Ministerio de Salud y Deportes, en Bolivia existen unos 2.000 pacientes renales que necesitan un riñón y cerca de 300 personas mueren cada año por insuficiencia renal, mientras esperan el anhelado trasplante de riñón.
El Hospital Obrero reanudó el 2010 los trasplantes de riñón con donantes vivos y en diciembre pasado realizó dos injertos cadavéricos a dos enfermos renales crónicos, de escasos recursos, que ahora podrán vivir al menos unos 10 años más, sin necesidad de la hemodiálisis.
“El que tiene insuficiencia renal crónica tiene una calidad de vida muy mala, no puede ingerir nada porque los alimentos se tienen que eliminar a través del riñón y si éste está mal, todo se complica. Para reemplazar esa importante función se debe acudir a la hemodiálisis peritonal”, resume el director del Obrero, el médico Freddy Sandy.
Unas 200 personas en La Paz acuden a este tratamiento de manera diaria y 20 máquinas trabajan en cuatro turnos. La Caja Nacional de Salud brinda el servicio como parte del Seguro para los trabajadores.
Por eso las opciones del trasplante con donante vivo y ahora cadavérico, como medida terapéutica, permitirían a Gonzalo Simbrón y a otros 199 pacientes restablecer la función del riñón. “No sólo hay que curar, sino curar con calidad de vida”, asevera Sandy desde la Unidad de Terapia Intensiva (UTI) del Hospital Obrero, en Miraflores.
Simbrón se ilusiona al oír sobre los dos últimos casos de trasplante con un donante cadavérico. Él es uno de los candidatos al trasplante. “Espero un donante estoy buscando uno. Hay gente a la que un día les hice un favor y ahora se me acercaron dos para (donarle su riñón), pero lamentablemente no son compatibles conmigo”, afirma con dolor.
VULNERABLES. A unos cinco metros de Simbrón se encuentra el concejal del MSM, Freddy Miranda, postrado y conectado a otra máquina que suple las funciones del riñón. “Los paceños debemos hacernos siempre el examen de la creatinina porque muchos tenemos presión alta y es una de las causas para la insuficiencia renal además de la diabetes”, recomienda.
Simbrón, que en la década pasada llegó a presidir cuatro comisiones en la Cámara de Diputados, durante dos gestiones, se arrepiente el haber hecho poco por la salud. “Nos hemos equivocado, cuando estamos en plena función de Gobierno, los políticos nos olvidamos de la salud”.
Aún conserva su gran contextura física, pero habla muy poco y reconoce que el tratamiento además de ser “un poco incómodo va matando poco a poco tu organismo”.
El ex político ahora es el presidente de la Asociación Boliviana de Dialisados y Trasplantados cargo al que no dudó en aceptar cuando le invitaron los cerca de 2.000 afectados.
“El transplante es una bendición, aquí el 70 por ciento de nosotros sueña con uno”, señala el ex político. Levanta la cabeza, habla con las manos, se oye su voz de mando, quizás como esos días cuando se dirigía a sus militantes en una concentración política y pide otro deseo. “Ojalá que nuestras autoridades puedan aprobar el Reglamento del Donante que salvaría muchas vidas en Bolivia”.
Algunos datos de la patología
LA INSUFICIENCIA RENAL
Es cuando los riñones dejan de funcionar correctamente. Fisiológicamente se describe como una disminución en la filtración de la sangre tasa de filtración glomerular (TFG). Clínicamente, esto se manifiesta en una creatinina del suero elevada.
SILENCIOSA
Esta enfermedad es silenciosa y los síntomas no se manifiestan, uno puede llevar el mal desde hace 10 años, por eso es vital el control médico, al menos una vez por año, para detectarlo y tratarlo.
Existen dos clases de donantes
Para quienes sufren de insuficiencia renal, además de la hemodiálisis, existe la posibilidad del transplante de riñón con donantes vivos y ahora también cadavéricos.
“Para el primero, la ley señala que deben ser familiares hasta el cuarto nivel de parentesco y ahora pueden acceder aquellos que tengan un vínculo laboral”, dice el cirujano general del Hospital Obrero, Luis Áñez.
En el segundo caso, la familia de forma voluntaria puede donar el riñón de su familiar de manera altruista para que alguno de los enfermos crónicos renales, previo estudio médico, pueda recibir el riñón de la persona que necesariamente debe haber fallecido de muerte cerebral, explica el médico.
En el Obrero funciona el Programa del Donante Vivo donde uno puede presentarse para donar su riñón. Quienes donan no tienen ninguna dificultad física luego.
Periodista:Jorge Quispe - La Paz
http://www.la-razon.com/version.php?ArticleId=123669&EditionId=2402.
Hace un par de días otro chico nos dejó un comentario a esta noticia donde ofrecía uno de sus riñones a la venta. AVISO: NUNCA PUBLICAREMOS NADA ASÍ, PORQUE ES ILEGAL.
ResponderEliminarSólo en países subdesarrollados se permite publicitar este tipo de ventas. Es un atentado contra la vida, ya que, al ser ilegal, no hay garantía alguna.
Rogamos que todo el que pretanda usar nuestro blog con este fin se abstenga, o nos veremos obligados a poner los datos de los vendedores en manos de las autoridades.
Beatriz González Villegas.
holas dono mi riñon llamame al 73813368 ME LLAMO ANGEL
ResponderEliminar¿Donas, Ángel, o "donas a cambio de un pequeño incentivo económico?
ResponderEliminarSi donas (Donar sólo es donar si es gratis y por solidaridad) te lo agradecemos de corazón. Si no, te deseamos suerte. Ya sabes, lo que colgamos en el anterior comentario.
hola el riñon q necesito es para mi madre lo necesita urgente x favor ayudenme no m quiero quedar sin madre ella es toda mi vida llamar a este numero 081721311 atudenme
ResponderEliminarhola mi nombre es onel y quiero donar mi riñon a alguien que relamente lo necesite.
ResponderEliminareste es mi correo onel.rojas@nauta.cu
escribanme quien realmente lo necesite, yo ire al lugar que tenga que ir por salvar una vida.