Cheney dice que podría necesitar un trasplante de corazón.
Washington, 18 ene (EFE).- El ex vicepresidente Dick Cheney, que ha
sufrido cinco ataques al corazón y que vive con una bomba cardíaca tras
su última intervención quirúrgica, cree que pronto tendrá que tomar una
decisión sobre si se someterá a un trasplante.
En una entrevista
con la cadena NBC transmitida hoy, Cheney dijo que ha llegado al punto,
"tras 30 años y cinco ataques cardíacos en el que realmente tenía que
hacer algo", y fue en julio pasado cuando decidió implantarse una bomba
cardíaca, a la que, aseguró se ha adaptado ya.
La bomba cardíaca
es un dispositivo de nueva tecnología que toma la sangre del ventrículo y
la bombea hacia la aorta. Funciona con una batería exterior a unas
9.000 revoluciones por minuto, pero está concebida como una ayuda de
transición hasta que se haga posible el trasplante.
Por tanto, el
ex vicepresidente de George W. Bush, que tiene 69 años y que sufrió su
primer ataque cardíaco cuando tenía 37, indicó en la entrevista que
tendrá que tomar una decisión al respecto en algún momento.
"No me
he decidido todavía. La tecnología ha ido mejorando y mejorando cada
vez más y tenemos más y más experiencia de gente que vive con esta
tecnología. De manera que tendré que tomar una decisión en algún momento
sobre si quiero someterme a un trasplante", pero no ha hablado aún con
su familia y los médicos, dijo.
Cheney, vicepresidente entre 2001 y 2009, se ha sometido a operaciones de marcapasos y a varias angioplastias.
En
2001 los médicos le implantaron un marcapasos especial y en 2008 le
devolvieron el ritmo normal del corazón mediante un choque eléctrico.
Fue la segunda vez en un año en el que experimentó y fue tratado por una
fibrilación auricular.
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