Extremadura. España.
El SES, Servicio Extremeño de Salud, indemniza con 45.000 euros a una familia por no haber realizado en los tiempos establecidos un trasplante de médula
Miguel Rodríguez tenía 46 años cuando le diagnosticaron un
mieloma múltiple (cáncer de médula) en el Hospital Materno Infantil de
Badajoz. Tras luchar contra la enfermedad durante meses y someterse a
quimioterapia los facultativos le aconsejaron que se sometiese a un trasplante
autólogo (un cultivo de las propias células del paciente), informa HOY.es.
Dicho proceso consiste en dos partes: la primera es una movilización
(obtención de progenitores normales de médula ósea 'stem-cell' o células madres)
y una segunda que es el trasplante en sí mismo, que debe tener lugar quince días
o un mes después, según los expertos médicos.
Miguel nunca pudo someterse a la segunda parte
del proceso. «No se lo hicieron porque simplemente se les olvidó, porque
coincidió con las vacaciones de verano, así de simple», resume Jorge Palacio
Rodríguez, el abogado de la familia. Su viuda, Manoli Bueno Martín, que estuvo
al lado de Miguel durante todo el proceso, piensa exactamente lo mismo.
Tres años después de la muerte de Miguel, el 6 de noviembre de 2007,
su familia se siente satisfecha de que el
Servicio Extremeño de Salud haya reconocido que existieron «una serie de
actuaciones negligentes considerables» en un informe oficial realizado
por la Inspección de Servicios Sanitarios y Prestaciones de la Consejería de
Sanidad y Consumo de la Junta de Extremadura. Más información en HOY.es
http://www.logalia.net/Temas-tristes-_75496.aspx
es una verguenza lo q hicieron !! olvidarse de un pasiente por tranplantar,de ello dependia su vida.. siento verguenza ajena por los bien "llamados MEDICOS " SON POCOS LOS MEDICOS DE CORAZON,EL RESTO SE BASA SOLO EN DINER..
ResponderEliminarGLADYS DE ARGENTINA
Gracias, Gladys, por tu comentario; aunque sólo puedo decir en favor de los médicos que he ido conociendo a lo largo de mis treinta y tantos años como enferma que no son ellos los faltos de vocación o de corazón, sino la Administración, que los trata, muchas de las veces, como a basura.
ResponderEliminarTe apuesto lo que quieras que por este error sin perdón han caido cabezas de profesionales de la sanidad, pero las de los que obligan a cumplir procesos asistenciales sin personal suficiente, o leyes sin contar con enfermos y colectivos sanitarios, ésos siguen en sus puestos como si nada hubiera pasado. Y para colmo esos que administran muchas veces no son ni profesionales sanitarios ni enfermos, así que no tienen ni idea de en qué sitio andan metidos obligando a otros. Como ejemplo, la ministra actual. Ella, o cualquiera de los cargos de libre designación de cada comunidad autónoma, acaban con la vocación del más pintado, y los que sufrimos esto somos los enfermos en primer lugar, y ellos mismos porque no trabajan como imaginaron durante tantos años como ocupa su carera médica. Si quieres un día hablamos de médicos de primera línea que andan ninguneados y alejados de los lugares de decisión clínica sólo por no dar sus brazos a torcer.Gracias, Gladys, y ojalá en Argentina no sea como aquí en ese aspecto.
Bea.