Hay 530 pacientes que están a la espera de un órgano
530 personas esperan por un trasplante en Uruguay. Desde que en septiembre se reglamentó la nueva ley que establece que toda persona al fallecer se convierte en donante, los procedimientos crecieron. Sin embargo, hay familias que se resisten.
CARLOS TAPIA16 feb 2014
"No importa si alguien plantea su inconformidad, si nosotros no cumplimos con esto no cumplimos con la ley... No es en la mayoría de los casos, pero el estado de resistencia existe", confiesa a El País la directora del Instituto Nacional de Donación y Trasplante (INDT), Inés Álvarez.
El 14 de septiembre del año pasado empezó a regir la ley que establece que toda persona mayor de 18 años que fallezca es considerada donadora de órganos, salvo que exprese en un documento que se niega a serlo. Este trámite solo lo hicieron unas 1.100 personas.
Considerando que hay 3.200.000 habitantes, unos 880.000 son menores y una minoría se niega a donar sus órganos, en Uruguay hay más de 2.300.000 donantes. Antes de la nueva ley había solo 660.000 en el registro del INDT.
En la actualidad 480 personas esperan un trasplante renal, 25 un hepático, 21 uno cardíaco y 4 de pulmón; 530 en total. Todos estos pacientes forman parte de listas de espera en las que los tiempos se demoran de cinco meses a más de tres años, dependiendo de qué órgano se trate (ver aparte).
La nueva ley ya demuestra tener buenos resultados, según sostiene Álvarez. Y, como ejemplo de esto, advierte que se hicieron 14 trasplantes renales y 6 hepáticos más en 2013. Así, se llegó a 153 trasplantes de órganos, un número algo mayor al promedio de los últimos años, en los que no se sobrepasaba la cifra de 130.
Hay otros datos que también revelan estos cambios. Por ejemplo en 2013 hubo 17,88 donantes reales de órganos por millón de personas (pmp), contra 16,06 en 2012. En tanto, donantes efectivos fueron 16,97 contra 15,45 pmp.
Por otra parte, en lo que respecta a los donantes de tejidos se pasó de 28,18 en 2012 a 33,33 pmp el año pasado.
La diferencia entre donante real y efectivo es que en el primero los órganos fueron estudiados y extraídos; en el segundo, en tanto, estos también fueron efectivamente trasplantados.
Situación límite.
"No cualquiera es un donante de órganos, comúnmente se trata de personas que tuvieron una muerte trágica", dice la directora del INDT al explicar el porqué de la resistencia de algunas familias a que los órganos de su ser querido sean utilizados en otra persona. Además, se debe tener en cuanta que este proceso se lleva adelante apenas una horas después del deceso.
"La ley fue elaborada pensando en el bien mayor. ¿Qué quiere decir esto? Que cuando el individuo deja de ser un ser humano y se convierte en lo que se convierte cuando fallece, si hay algunos órganos y tejidos que son viables, estos deben ser utilizados, porque del otro lado están los pacientes que los están esperando", explica Álvarez.
La directora advierte que en los casos que se producen enojos, que insiste en que son la minoría, se debe, casi siempre, a un desconocimiento de los usuarios sobre las familias sobre la nueva ley de donación y trasplante.
"Lo que cambian son los tiempos en el proceso. Antes se demoraba mucho al consultar a la familia. Ahora, tan solo se le informa que el fallecido tiene la condición biológica para ser donante", manifiesta Álvarez.
Los cambios.
La ley N° 18.968 establece que "toda persona mayor de edad que, en pleno uso de sus facultades, no haya expresado su oposición a ser donante por alguna de las formas previstas en el artículo 2º de la presente ley, se presumirá que ha consentido a la ablación de sus órganos".
El artículo 2º advierte que la oposición a donar puede ser expresada por: inscripción directa ante el registro del INDT, al momento de afiliarse a una institución de asistencia médica, al gestionar o renovar el carné de asistencia que expide la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), al obtener o renovar del carné de salud, en ocasión del alta de internación de un establecimiento hospitalario, ante escribano público ya sea en escritura pública o por acta notarial, o ante un Juez de Paz.
También se estudia la posibilidad de que en un futuro cercano el trámite, que no importa de que forma se haga siempre debe ser gratuito, pueda realizarse a través de internet.
Entre dos y tres años por un riñón
La lista de espera para un trasplante de riñón es de 2,57 años. En 2013 se hicieron 115 procedimientos en Uruguay. En tanto, los de trasplante reno-pancreático, que se hicieron solo cuatro, tienen una lista de espera de 3,22 años.
Estos son los trasplantes para los que los pacientes aguardan más. Le siguen el cardíaco, que se hicieron cinco, con 1,85 año, y el hepático, que se hicieron 23 y se espera medio año.
En tanto, en lo que respecta al trasplante de cornea, el tiempo de espera es de 10 meses y en 2013 se realizaron unas 122 operaciones.
El programa de trasplantes activos que tiene Uruguay -es decir, aquellos para los que se hace el estudio de pre-trasplante, el acto quirúrgico en sí y el seguimiento del paciente- comprende los procedimientos para riñón, páncreas, hígado y corazón.
Luego hay programas incompletos, que incluyen pulmón e intestino. Para estos, el acto quirúrgico se lleva adelante en la Fundación Favaloro, en Buenos Aires.
Pulmón.
Semanas atrás, el Fondo Nacional de Recursos (FNR) llamó a instituciones interesadas en desarrollar un proceso de selección para llevar adelante un Programa de Trasplante Pulmonar en Uruguay.
La idea es instalar en breve módulos de pre-trasplante y post-trasplante pulmonar, en tanto la implementación del módulo de trasplante pulmonar será considerada posteriormente según el volumen de pacientes.
Desde 2004 a 2013 se evaluaron 109 pacientes (11 cada año) de Uruguay, de estos calificaron 34 que pasaron a una lista de espera para ser operados en la Fundación Favaloro. Solo 14 fueron trasplantados y 13 fallecieron, según el FNR.
Sin verse las caras.
Luego de que se realiza el trasplante, según establece la ley desde 1971, no se debe revelar a la familia del donante quién es el receptor, ni viceversa.
Según la directora del Instituto de Donación y Trasplante (INDT), Inés Álvarez, no es frecuente que estos quieran conocerse, "pero cuando pasa no se hace ese contacto"
"Esto está bien planteado porque la mayoría de los receptores hacen un agradecimiento genérico ante ese donante, pero no les interesa individualizarlo", sostiene.
Órganos: donación en cifras
1. Hay 2.300.000 donantes
Considerando que hay 3.200.000 habitantes en todo el país, que 880.000 son menores y que solo 1.100 hicieron el trámite para no convertirse en donantes de hecho -según lo que establece la nueva ley-, se puede decir que hay unos 2.300.000 donantes de órganos en Uruguay. Antes de la reglamentación que empezó a regir en septiembre de 2013, eran apenas 660.000 los voluntarios.
2. 480 a la espera de un riñón
De las 530 personas que están a la espera de un trasplante de órganos en el país, 480 necesitan un riñón, 25 un hígado, 21 un corazón y 4 un pulmón. El año pasado se hicieron 153 trasplantes, más que el promedio de los últimos años, que era de unos 130. Para la directora del Instituto Nacional de Donación y Trasplante (INDT), Inés Álvarez, esto se debe a que la nueva reglamentación aligera los tiempos.
3. Una espera de 3,22 años
La lista de espera más grande que tiene el INDT, corresponde a quienes aguardan un trasplante reno-pancreático y es de 3,22 años. En el caso de trasplante renal el lapso pasa a 2,57, de corazón a 1,85 y de hígado a seis meses. Por otra parte, en lo que son los trasplantes de córnea, que se hicieron 122 en 2013, la lista de espera es de unos 10 meses.
4. Por millón, 17,88 donantes reales
En Uruguay hay 17,88 donantes reales por millón de personas (pmp). Este número creció producto de la nueva ley; en 2012 se llegaba a 16,06. En tanto, en lo que respecta a los donantes efectivos, se trata de 16,97 contra 15,45 pmp. La diferencia entre uno y otro es que el real fue estudiado y le fueron extraídos los órganos; el efectivo, en tanto, se trata de trasplantes que ya fueron consumados.
5. 14 trasplantes reales más
Pese a que la ley N° 18.968 recién se reglamentó en septiembre del año pasado, según Álvarez ya se notan las primeras mejoras. Por ejemplo, 2013 se cerró con 115 personas que recibieron un trasplante de riñón y en 2012 fueron 101; en tanto, se realizaron 24 trasplantes hepáticos, contra 18 en el año anterior. Para la jerarca, sin embargo, el éxito de la medida se notará recién a finales de 2014 cuando se cumpla poco más de un año de la ley.
Imagen |
Imagen: http://img.lasegunda.com/Fotos/2012/07/13/file_20120713104403.jpg
Publicado en http://www.elpais.com.uy/informacion/mas-trasplantes-nueva-ley-donantes.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario