Publicado Lunes, Mayo. 20, 2013
Por Susan McFarland
smcfarland@star-telegram.com
FORT WORTH - Crecer con diabetes tipo 1 no ha sido fácil para Delaney Alves, graduado de Timber Creek High School en 2012
Diagnosticado a los 2 años, su rutina diaria consiste en comprobar los niveles de azúcar en sangre, contar los carbohidratos e inyectarse las unidades de insulina. Cuando Delaney Alves tenía 6 años, su padre murió de la enfermedad a los 36 años.
A diferencia de la diabetes tipo 2, impulsada por la obesidad y la inactividad, la diabetes tipo 1 es una enfermedad dependiente de la insulina sin relación conocida con el peso o la falta de ejercicio.
Delaney Alves, de 19 años, de Fort Worth, dijo que ya no tiene sensibilidad en las yemas de los dedos de todos los años que lleva haciendose la pruebade los niveles de azúcar capilar, niveles que suben y bajan peligrosamente varias veces al día, incluso mientras duerme.
Gracias al nuevo miembro de la familia, Dex, un perro de servicio en diabetes, Alves puede dormir por la noche sin preocupaciones.
El perro, un Labrador Retriever de 7 meses de edad, de color amarillo, fue entregado a Alves 8 de febrero por la compañía "Perros de Servicio Warren Retrievers Inc.", una compañía sin ánimo de lucro, que está ubicada en Orange, Virginia.
Dex es capaz de sentir los problemas de azúcar 45 minutos antes de que le aparezcan síntomas y alertas a Delaney. Durante la noche, si Delaney no despierta, Dex avisa a la madre de Delaney, Judy.
Dex puede incluso dejar que Delaney sepa si tiene el azúcar alta o baja, tocando con su nariz si es baja, o restregándose, si es alta. Si el nivel de azúcar en la sangre es alta, la sangre huele a azúcar, sin embargo los niveles bajos huelen a acetona para Dex.
Hace aproximadamente un mes, Dex comenzó a avisar a Alves a las 20:00 de que algo andaba mal.
Alves dijo que sus niveles de azúcar en sangre deben oscilar entre 80 y 130 y en ese momento, su nivel era de 120. Así que estaba bien.
"Seguí comprobando hasta las diez de la noche, pero todavía estaba en rango, así que me fui a la cama", dijo Delaney. "Me desperté dos horas más tarde gracias a Dex y tenía sólo 30 de azúcar."
El hermano de Delaney, de 15 años de edad, Dyllan, también ha sido diagnosticado con diabetes tipo 1. Dex también avisa a Dyllan.
Judy Alves dijo que todavía se preocupa por sus hijos, pero duerme mucho mejor por la noche gracias a Dex.
"Él es muy inteligente", dijo Judy Alves. "Ya nos estaba avisando a los 10 minutos de estar en nuestra casa. Hace lo que puede para conseguir nuestra atención."
Dex comienza alertando bostezando, rascándose detrás de la oreja, empujando o escarbando. Otras advertencias de alerta incluyen jadeo pesado o una especie de silvidos.
Si estas señales no se notan, Dex toma otras medidas, como correr por la habitación, saltando por el sofá y empieza a actuar en plan salvaje.
Delaney nos aseguró que Dex incluso le avisa incluso mientras está conduciendo el coche, evitando no sólo una tragedia a él mismo, sino a otros por el camino.
"Se me hace mucho más seguro salir", dijo Delaney Alves.
Pat O'Brien, la abuela de los chicos, asegura que Dex es una bendición para toda la familia.
"Simplemente me sorprende", dijo O'Brien. "Todavía estoy con miedo. Se me hace más cómodo cuando estoy aquí sola con los dos ".
Delaney Alves nos contó que ahora con Dex se preocupa más por su futuro y su propia formación, que tiene planes para ir a la universidad de Arizona, y que podría estudiar para obtener un título en diseño gráfico y diseño web.
Para entonces, la familia Alves espera tener un perro alerta en diabetes para Dyllan, pero el costo es muy caro.
Judy confesó que desde abril de 2012 empezaron a recaudar dinero para un perro de servicio diabético.
Gracias al generoso apoyo de los amigos de la familia, y de su iglesia, consiguieron recaudar en principio 100 dólares, que fueron aumentando rápidamente hasta 1000$, cantidad necesaria para iniciar el proceso para conseguir un perro para ellos.
En la víspera de Navidad, Judy recibió una llamada donde le comunicaron que se haría un partido, y que el perro se entregaría en febrero.
El coste total para tener a Dex es 20.500 dólares. La familia Alves todavía está pagando por el perro con la recaudación de fondos y con las donaciones.
Si quieres saber más sobre los perros de servicio o hacer una donación, vaya a www.sdwr.org.
Susan McFarland, 817-390-7547 Twitter: @susanmcfarland1 Susan McFarland, 817-390-7547 Twitter: @ susanmcfarland1
http://www.star-telegram.com/2013/05/20/4870527/diabetic-service-dog-saves-the.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario